Las luciérnagas no son moscas en absoluto: son escarabajos! De todos los insectos en el mundo, las luciérnagas están entre las pocas que han evolucionado un extraordinario lenguaje de luz.
Muchas luciérnagas usan un sistema de destellos en algunas de las mismas maneras que usamos las palabras: para atraer, para decir, “aquí estoy”, incluso para engañar.
Emiten luz de un pequeño órgano, llamado linterna, en la parte inferior de su abdomen, donde una reacción bioquímica tiene lugar dentro de células especializadas llamadas fotocitos. La reacción libera energía en forma de luz.