El geoglifo gigante de Atacama, conocido como el “Gigante de Atacama” o “Gigante de Tarapacá”, es una impresionante figura ubicada en la región de Tarapacá, Chile.
Se encuentra en la ladera del cerro Unitas, cerca de la ciudad de Iquique, en el desierto de Atacama, uno de los lugares más áridos del mundo.
El geoglifo mide aproximadamente 86 metros de altura y 50 metros de ancho, lo que lo convierte en uno de los geoglifos más grandes del mundo.
La figura representa a un humanoide con rasgos distintivos, como una gran cabeza y brazos extendidos. Algunos estudios sugieren que podría estar relacionado con las culturas precolombinas que habitaron la región.
Se cree que fue creado por culturas indígenas que habitaron el área hace miles de años, aunque no se conoce con certeza su origen ni su propósito exacto. Podría haber tenido funciones rituales o ceremoniales.
El geoglifo fue realizado al retirar las piedras oscuras del desierto para dejar al descubierto el suelo claro debajo, creando un contraste visible desde lejos.
A pesar del paso del tiempo y la erosión natural, el Gigante de Atacama se ha mantenido relativamente bien conservado. Sin embargo, está en riesgo debido a actividades humanas y la falta de protección adecuada.
Ha sido objeto de estudio por parte de arqueólogos y antropólogos que intentan desentrañar su significado y la cultura que lo creó.
