Un fuerte sismo de magnitud de 7.4 hasta 7.5, según diversas fuentes, sacudió la isla de Honshu, en la península de Noto, prefectura de Ishikawa, en Japón, que activó la alerta de tsunami en la costa occidental del país.
El potente sismo dejó personas atrapadas bajo los escombros y generó olas de hasta 1.2 metros a unos 500 kilómetros de Tokio.
Se esperaban torrentes de agua de hasta cinco metros y hubo réplicas constantes.
En México, el Centro de Alertas de Tsunami descartó variaciones en el nivel del mar.



